Yamaha MT-03/YZF-R3 «Dupla de campeonas»
Jojutla, Morelos. Una nueva integrante de la familia Naked de Yamaha ha llegado, con un compacto, pero poderoso motor de 320 cc, la MT-03 de la firma japonesa nos demostró en una ruta de poco más de 370 km (originalmente 320 km en referencia a la cilindrada de la MT-03) que su nueva Naked mediana, posee los argumentos necesarios para dar el cara a cara con sus más cercanas rivales.
Inicia la Aventura
Todo comenzó al poniente de la ciudad de México, específicamente en la agencia Yamaha Terraventura Santa Fe, ubicada en Av. Santa Fe No. 443, desde donde partimos con rumbo a la carretera México-Toluca, solo para tomar posteriormente la desviación a Cuernavaca. Aquí comenzamos con la YZF-R3 y nuestra ruta ya se había sazonado con el clásico y espeso tráfico de esta locación capitalina, pero para la R3 y MT-03, esto no representa ningún obstáculo, pues la cómoda posición de manejo –más aún en la naked-, amplio radio de giro y capacidad de respuesta, nos permitieron evadir esta etapa sin problema alguno.
Toda vez que dejamos detrás la ciudad para tomar la carretera México-Toluca, comenzamos a experimentar las increíbles sensaciones que el bicilíndrico de poco más de 300 cc enfriado por agua es capaz de transmitir al abrir gas. Sí, la R3 nos demostró aquí y durante los siguientes 120 kilómetros que no necesitamos comprar una 600 cc para experimentar la sensación de una deportiva, aunque sabemos que cada una tiene lo suyo, la experiencia jamás decepcionó.
La primer parada fue la bella presa y voladero de “El Mogote” ubicado en Morelos. Aquí nos tomamos un “break” para compartir nuestra experiencia a bordo de la unidad que nos tocó probar, donde ipso facto, compartimos la gran percepción que nos dio la “R”. Una moto sencilla en su manejo, ágil como una de baja cilindrada, pero potente y con el aplome suficiente que una deportiva debe poseer. Durante la ruta, tuvimos curvas y rectas suficientes como para poder exponer las virtudes de este ejemplar, que no dejó de sorprendernos. Durante el trazado, se comportó con la dignidad de una ávida deportiva, un paso por curva lo suficientemente limpio y ágil respuesta a los cortes de marcha, algo que bien puede sorprender a cualquiera. Todo, sin perder el confort de una motocicleta de uso urbano.
Que la Fiesta Continúe
Tras una merecida comida que la marca nos preparó en los paradisíacos “Jardines de México”, nos dispusimos a continuar la rodada. Esta vez, fue el turno de la MT-03, la que de inmediato nos comunicó una postura más relajada pero sin perder la enorme respuesta mecánica proveniente del citado propulsor de dos cilindros. En ciudad, no existe rival para ella, el manillar, ubicado en una posición más elevada, así como el ajuste de geometría de su chasis, marca la diferencia, sobre todo, en la posición de los pies y el comportamiento final del conjunto. En autopista, la gran diferencia radica en la ausencia del carenado, que a bien posee su hermana la R3, sin embargo, más allá de esto, nada cambia y podremos disfrutar de las bondades mecánicas que tanto nos gustan de este ejemplar, una –casi- inmejorable fórmula que la firma japonesa ha realizado.
Sin importar el modelo, podremos disfrutar de su tablero con pantalla LCD y tacómetro análogo de gran dimensión, botonería ergonómicamente posicionada y un gran estilo impreso en cada ejemplar. La calidad de los componentes se percibe de inmediato, desde el esquema de suspensiones, tacto de materiales, acabados en cada sección del conjunto y tacto de frenos, donde insistimos que, la única área de oportunidad de cualquiera de estos dos ejemplares, es la ausencia del sistema ABS en el apartado, donde si bien sabemos que no está presente por términos de costos finales, al menos debería ofrecerse en opción. En lo general, podemos expresar que Yamaha lo volvió a hacer, esta vez, con una muy competente dupla de campeonas, dispuestas a todo en un nuevo segmento de 300 cc.
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