Hijo de tigre: BMW C600 Sport y C650 GT
Apareció en MOTOCICLISMO 105 (abril-2012)
Quizá la presentación de estos dos scooters fue uno de los secretos peor guardados de los últimos años pero quizá esa era la idea. La presentación oficial en el Salón de Milán a fines del año pasado nos hacía generar muchas expectativas sobre las características de dos ejemplares que a simple vista robaban miradas y que, una vez que los hemos puesto en marcha no han descepcionado a ninguno.
Pero vayamos por partes. Cuando BMW ha decidido incursionar en algún segmento fuera de su zona de confort se toma su tiempo y cuando lanza algo es porque será contundente, sólo hay que mirar uno de sus más recientes éxitos, la superdeportiva S1000 RR, o qué tal un poco después la seis cilindros K1600.
Con estos scooters no dudamos que pasará algo similar pues han invertido tres años en su desarrollo y los resultados son palpables. El aire de familia es innegable, las líneas, la pulcritud y a la vez lo contemporáneo del C600 Sport no desmerece a cualquier auto deportivo de la casa de Baviera. Las prestaciones, el confort y el gran desempeño de la C650 GT son una extensión de cualquier turismo de alta cilindrada. Ambos conceptos han nacido simultáneamente en un afán de incursionar en un segmento que hoy en día está en pleno apogeo, la movilidad urbana, y la movilidad en la Ciudad de México es buena muestra de esta necesidad, aunque el principal mercado que ha propicado este par de scooters es el del las grandes capitales del sur de Europa, donde durante algunos años han reinado maxiscoters como el Burgman o el T-Max, una hegemonía que se ve amenazada seriamente con la incursión de estas dos bellezas. Y esto sucederá cautivando no solo a los que ya están en el mundo de las dos ruedas, sino a quienes estando en los autos confían plenamente en la marca y no quieren perderse esta novedad, de hecho, se estima que también estarán disponibles en las agencias de autos de BMW.
partiendo de cero
Con un motor inédito bicilíndrico en línea de 647 cc que comparten ambas monturas, la movilidad sólo es un pretexto pues las capacidades tanto de la C600 Sport o de la 650 GT rebasan las calles y se trasladan a la carretera, ofreciendo una manera de hacer turismo también inédita, ya que los 60 HP de potencia y los 66 n/m de par motor serán más que suficientes para alcanzar velocidades crucero muy buenas, cuestión que comprobamos en las autopistas madrileñas al alcanzar hasta 175 km/h con una estabilidad sorprendente. Pero ¿quién quiere correr a esa velocidad con un scooter? Estamos de acuerdo que no es la finalidad, pero arriba, de momento, te olvidas que vas en un scooter.
Como hemos dicho, ambas comparten motor, así como chasís y la mayoría de los componentes y difieren en cuestiones como equipamiento, posición de conducción y apenas unos kilos extras en la version GT, pero ¿por qué se llama una 600 si el motor es mayor? Llamémosle mercadotecnia, ya que la cifra 600 es muy característica del segmento de motos deportivas supersport y quisieron adoptarlo como un número muy alusivo.
La C600 Sport es cautivadora en su estética y desde luego en las sensaciones. Al subirte y ponerla en marcha se percibe un ronroneo un poco diferente a cualquiera de las máquinas alemanas, a pesar de ser refrigerada por líquido. Un tablero totalmente digital te indicará velocímetro, nivel de combustible, revoluciones, cuentakilómetros, etc. La puesta en marcha es fácil ya que se alcanza a apoyar los pies firmes en el suelo y una vez que subes la pata de cabra, que libera el freno de mano, la conduccción es muy ágil. Las suspensiones son parte de la escencia de la casa. La horquilla invertida delantera con barras de 40 mm y recorrido en ambos trenes de 115 mm absorben muy bien las imperfecciones y permiten buen curveo en carretera.
La posición de manejo es desde luego deportiva, los pies un poco adelantados y el asiento bastante amplio para adoptar la talla que sea el piloto, es suficientemente angosta para un buen desplazamiento citadino. La respuesta al acelerador es inmediata y constante gracias al fuel injection. El parabrisas de buen tamaño es ajustable en tres posiciones, eso sí, en la versión Sport es manual mientras que en la Touring es electrónico. La frenada no tiene duda ya que monta doble disco delantero y uno trasero de 270 mm además que incorpora ABS de serie. Los neumáticos, unos Pirelli Diablo Scooter sobre rines de 15 pulgadas. Dentro de las innovaciones en este scooter sobresale el sistema de almacenamiento exclusivo de BMW llamado FlexCase, que permite ampliar la capacidad de carga del portaobjetos debajo del asiento para almacenar hasta dos cascos integrales. El sistema impide la marcha si este compartimento se encuentra “abierto”.
Con el sello de la casa
Por otro lado el C650 GT no niega la gran influencia de su hermana la BMW R1200 RT en su estética y se percibe también en sus capacidades turísticas. Una protección aerodinámica sobresaliente tanto en piernas como en tronco y cabeza. Los intermitentes de LED incrustados en los amplísimos espejos retrovisores, hueco bajo el asiento con capacidad sobrada para dos cascos integrales, dos guanteras, parabrisas regulable electronicamente, amplias plataformas para los pies del conductor y pasajero, posición de conducción más relajada y espaciosa, respaldo de conductor y freno de mano que se activa al poner a pata de cabra.
Como comprobamos ambas son dos productos que pretenden satisfacer cada una de las dos modalidades de condución que uno prefiera, con la garantía y calidad que BMW suele ofrecer. Los representantes de la marca afirmaron que la primera fase de producción estaría orientada al mercado europeo y sobre México, la fecha estimada para su llegada es septiembre, cuando suceda seguramente la volveremos a tener para una prueba más profunda en territorio mexicano y, seguramente estarás preguntándote el precio, un detalle que aún no fue revelado para México, pero aunque en Europa supera apenas los 10,000 euros, esperamos un precio aún más contenido para nuestro mercado, en cualquier caso, es un producto distintivo y que te dará status y buenas prestaciones. Enviado a Madrid, España:
A detalle
El propulsor de los dos scooters BMW es el mismo, un bicilíndrico en línea de 647 cc, 8 válvulas, doble árbol de levas, dos ejes de equilibrado e inyección electrónica. Es totalmente nuevo, estrecho y alargado y pesa 81 kg. Ha sido diseñado por BMW y desarrolla una potencia maxima de 60 HP (44kW). El embrague centrífugo queda justo por detrás (dentro) del variador, lo que ha obligado a BMW a hacer un gran esfuerzo en su ventilación. El eje del basculante coincide con el del piñón de ataque, una solución necesaria, puesto que la trasmisión secundaria es por cadena sellada y el basculante monobrazo aloja la transmission. El equipamiento de serie incluye el ABS y la instrumentación dominada por un gran reloj velocímetro, cuenta con computadora de a bordo. Bajo el asiento encontramos el sistema de almacenamiento FlexCase, que permite alojar dos cascos integrales en parado. Como buena BMW, el equipamiento opcional es abundante: Luces de LED diurnas, puños y asiento calefactables, control de presión de neumáticos y accesorios como portaobjetos, GPS, antirrobo y escape Akrapovic, entre otros.
Serafín Rebollo
Fotos: Alberto Martínez/BMW
