Control de Estabilidad por gas by Bosch

En la actualidad cualquier moto que se venda dentro de la Unión Europea trae consigo un sistema ABS que, más o menos avanzado, evita el bloqueo de la rueda delantera o trasera. En nuestro caso, algunas veces se ofrece como equipamiento opcional, otras tantas ya empiezan a incluirlo como elemento de serie y en otras no está ni contemplado. El ABS es un sistema relativamente simple que, aunque ha tardado en extenderse a todas las marcas, su implementación ha salvado incontables caídas, lesiones, enormes cantidades de dinero en reparaciones y sobre todo la vida de quien viaja en dos ruedas. 

Empresas como Bosch en colaboración con distintas marcas han venido encargándose del desarrollo de estos dispositivos de seguridad activa: ABS tradicionales, ABS en curva (en Bosch conocido como Motorcycle Stability Control), sistema de control de tracción etc. Entonces, si ya contamos con algunas, cuáles serán las siguientes. En la actualidad una moto del denominado “segmento premium» sale del concesionario con la habilidad de saber en que posición se encuentra en cada momento. De esta forma, es capaz de dosificar una frenada en plena curva para que la moto frene sin afectar a la trazada o produzca el bloqueo de una de las ruedas. También puede utilizar esa información para evitar los caballitos no deseados en aceleraciones fuertes o los derrapes, sea cual sea el punto clave es evitar pérdida de agarre al asfalto. Hoy ya hemos dado un gran paso adelante pero mañana es todavía más impresionante.

Bosch se ha encargado del desarrollo de un proyecto de investigación que se ha denominado: Sliding Mitigation Research, o lo que podríamos traducir como: Mitigación del deslizamiento. A pesar de que apenas se esté haciendo popular, se han encargado de probarlo y montarlo en una motocicleta para así poder recrear medidas más exactas sobre el comportamiento. Lo que pretenden es acabar con los problemas que se encuentran las motocicletas al circular por superficies deslizantes o de poco agarre, ya sea por baja temperatura en el asfalto, hojas mojadas, aceite etc… momento en el que se deja de aplicar suficiente fuerza lateral para mantener el agarre y, por tanto, la estabilidad. Son situaciones en las que podemos caer sin aplicar fuerza en los frenos o dar gas, por lo que ni el control de tracción ni el ABS consiguen salvar la caída.

Bosch ha querido solventar este problema con la creación de una fuerza lateral externa. Los alemanes han instalado un sensor que detecta cuando la rueda se desliza y, si supera cierto límite, un tanque libera gas a presión (el mismo tipo que encontraríamos en los airbags) hacia una cámara que dirige el flujo en la mejor dirección posible (opuesta al suelo). Esa fuerza lateral crea el suficiente agarre para recolocar la rueda y salir airoso con un simple susto. Por ahora debemos esperar a que este proyecto siga avanzando y verlo materializado en algún modelo; no sabemos si estará presente en algún salón o no pero seguramente tendremos noticias pronto del avance de esta implementación lo cual seguramente podrá resolver algunas caídas de ser completamente aplicado.

 

 

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *