Yamaha YZ450F, «Sangre Azul»

Motor, chasis, carrocería, arranque eléctrico, depósito… Casi todo cambia en la MX1 azul, que además sorprende con algunas innovaciones tecnológicas. Las muchas novedades que luce la nueva YZ450F, tanto en el motor como en el aparto ciclo, dejan clara una cosa, que Yamaha ha escuchado a los clientes y probadores de las anteriores versiones y se aplicado a fondo para mejorar los puntos débiles.

Todo parte desde la posición que ocupa el motor en el chasis, todavía con el cilindro inclinado hacia atrás, pero ahora con menor ángulo, buscando así mover el peso ligeramente hacia delante. Esto se combina con la sustitución de los soportes del motor, claramente diferentes los de la culata, pues ya no sujetan a ésta por la parte delantera, sino por la trasera, con el fin de alterar la rigidez del conjunto chasis-motor y con ello el comportamiento dinámico. La Yamaha YZ450F 2018 también luce novedades dentro del motor, como una culata más ligera -se mantiene su exclusiva admisión frontal-, unos árboles de levas con distinto «timing», nuevo cigüeñal, pistón rediseñado, sistema de escape y nueva inyección con cuerpo Mikuni de 44 mm. –antes, Keihin-. Con todo ello, la marca anuncia un óptimo compromiso entre prestaciones y facilidad de uso. La nueva 450 azul también se han realizado otros cambios en favor de la fiabilidad mecánica, con revisiones en el cambio –piñones con mayor superficie de contacto-, el embrague –componentes reforzados- y los radiadores –distinta posición y salida de conductos-.

 

Otras dos novedades destacadas en la Yamaha YZ450F 2018, las encontramos en la instalación de un sistema de arranque eléctrico, con batería de litio-ion y sin arranque a pedal, a pesar de este cambio anuncia el mismo peso que el modelo de 2017, 112 kilos con tanque lleno. También es llamativo el estreno de un sistema para modificar los mapas de la ECU mediante una aplicación para teléfonos móviles. Una solución que se adopta por primera vez en una moto de cross de serie, aunque ya se había visto en la industria auxiliar –GET ofrecía un sistema parecido para sus centralitas-. Se ha intentado corregir la ergonomía del conjunto con una carrocería más esbelta y un nuevo depósito de gasolina –ubicado entre el subchasis, igual que antes-, que ahora es de 6,2 litros de capacidad antes 7,5. y por lo tanto más compacto y estrecho.

 

Pero también se ha buscado corregir el «feeling» del tren delantero –ligero e impreciso, en generaciones anteriores-, tanto con la reubicación del motor, como hemos dicho antes, como modificando el propio bastidor. El nuevo chasís presenta un diseño claramente diferente, sin la «S» que marcaban anteriormente las vigas, sino un trayecto más recto. En esta ocasión no se anunciaron cambios para el basculante, las bieletas, ni el subchasis. No obstante, sí se ha rediseñado el asiento, que resulta más plano y, sobre todo, más bajo en la parte trasera, en hasta 20 mm. en comparación con el modelo anterior.

Otra de las peticiones del gran público, se ha visto cumplida en que Yamaha ha mantenido el material Kayaba en las suspensiones, alabadas en los últimos años por ser las mejores de su clase. De cara a 2018, simplemente se ha revisado la puesta a punto de la horquilla y especialmente el amortiguador. También se mantiene sin cambios los frenos Nissin, pero sí hay variaciones en la estética de la 450 azul, debido a la mencionada carrocería de nuevo diseño, los adhesivos revisados y las nuevas llantas anodizadas en azul. Éstas dos últimas modificaciones, son precisamente los únicos cambios que presentan el resto de integrantes de la gama Yamaha de motocross 2018, tanto la YZF 250 de 4T, como la línea Yamaha YZ 85, 125 y 250 2T. En este caso la disponibilidad y precio aún está en duda, pues Yamaha no mencionó dichos datos, los cuales les estaremos informando una vez que los tengamos.

{gallery}Yamaha-YZ450F-Renovada{/gallery}

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *